Hay muchas razones por las que vale la pena sumar los hábitos de las parejas exitosas a tu vida y a tus relaciones, la principal es que estos hábitos son la clave para construir relaciones más fuertes, más duraderas, con vínculos más profundos y que no caigan en terrenos tóxicos y problemáticos.
Para tener una relación exitosa no solamente hay que encontrar una pareja por la que se sienta atracción, más allá de lo físico, hay que trabajar para que esa atracción inicial se pueda convertir en algo más, para llegar a conocer a la otra persona, para resolver problemas y para construir una vida y un futuro.
La idea es que tus relaciones te hagan feliz y que le sumen algo positivo a tu vida, pero eso no va a pasar si no pones de tu parte y te esfuerzas un poco. Y no, no hay que forzar relaciones que no funcionan o llegar al extremo para arreglar cosas que realmente no tienen arreglo, pero sí hay que dar un extra cuando una relación vale la pena.
¿Y cómo puedes dar ese extra? Hay que empezar desarrollando buenos hábitos de pareja, relacionados con la comunicación, la convivencia y hasta la división de tareas y responsabilidades.
7 hábitos de las parejas exitosas para construir relaciones fuertes y sanas
Hablan de todo, lo bueno y lo malo
Ninguna relación puede crecer o fortalecerse si no hay comunicación, o si esa comunicación se limita simplemente a compartir lo bueno que les pasa.
La comunicación en pareja debe ser honesta, abierta y vulnerable, hay que hablar sobre los logros, los planes a futuro, las necesidades, pero también sobre los problemas, las inseguridades y los temas complicados, como el dinero, el sexo o la educación de los hijos, así pueden llegar a estar en la misma página o entender qué se puede hacer para lograrlo.
Buscan formas de pasar tiempo juntos
Compartir el mismo espacio no es lo mismo que pasar tiempo juntos. Las parejas exitosas buscan actividades en común, cosas divertidas, momentos en los que están presentes en la vida del otro, e incluso hacen tiempo para tener citas, incluso si llevan mucho tiempo juntos y han pasado por cambios importantes en la vida, como mudarse juntos, casarse o tener hijos.
Realizan las tareas de la casa en conjunto
Las responsabilidades se comparten, ya que al compartir esto la relación se vuelve equitativa y balanceada, y nadie llega a sentir que carga con más peso o que se esfuerza más que el otro.
Además, lavar platos o limpiar la casa juntos motiva a la cooperación, ayuda a que disfruten más de su espacio y a que puedan tener otra oportunidad para pasar tiempo juntos. Cuando las tareas se comparten, entonces se vuelven menos pesadas o tediosas.
Piden perdón
Definitivamente no hay que pasar toda la vida pidiendo perdón por todo, pero hay que aprender a reconocer los errores y los momentos en los que se llega a dañar a la otra persona, y pedir perdón como una manera de sanar y de poder avanzar.
Esto indica que hay madurez e inteligencia emocional, y que se busca reparar, sin culpar al otro por todo lo que sale mal.
Muestran afecto
Esto tiene que ver con lo emocional y lo físico, y va mucho más allá del sexo. El afecto se debe demostrar todos los días, esto para evitar que se pueda dar un distanciamiento o que la otra persona pueda llegar a sentir que no se le aprecia o que algo no va bien.
Las muestras de afecto pueden ser llevar flores, un abrazo, pequeños toques al pasado o palabras amables y afectivas. Todo vale, lo importante es hacerlo.
Trabajan en una rutina
Combinar las rutinas también ayuda a fortalecer la relación. Esto consiste en dormir a la misma hora, hacer ejercicio al mismo tiempo (aunque sean cosas diferentes) o empezar a comer al mismo tiempo, donde el objetivo es aumentar la convivencia y encontrar esos momentos para estar juntos aunque tengan cosas distintas a lo largo del día.
Se enfocan en lo positivo
Ninguna relación va a ser perfecta todo el tiempo, pueden surgir malos momentos y cosas negativas, pero las parejas más exitosas son las que deciden darle más peso a lo positivo, practicar la gratitud y hacer un esfuerzo por evitar las actitudes negativas. Así ponen las cosas en perspectiva y son más felices.