Si algo hace a un superhéroe, es su vulnerabilidad, esa parte que nos hace recordar que abajo del uniforme, la capa o el escudo, en naturaleza se trata de un ser humano con defectos y virtudes como todos los demás. De hecho, en ocasiones los problemas de un superhéroe son representaciones de las verdaderas debilidades que tiene la raza humana como colectivo.
Para bien o para mal, a Ben Affleck le tocó interpretar a lo largo de varios años al legendario Batman, el caballero de la noche que no solo lucha contra la injusticia en Ciudad Gótica, sino contra sus propios demonios. Al igual que Bruce Wayne, Ben ha luchado gran parte de su vida contra un enemigo que, en ocasiones, podría parecer más poderoso que él: su dependencia al alcohol.
Hace unas cuantas semanas, se reveló que el actor – después de dejar el atuendo de Batman– tuvo que ser internado en un centro de rehabilitación debido a su recaída al alcohol. También se dijo, y se vio en imágenes, que fue su propia ex esposa, Jennifer Garner, quien lo llevó a internarse y que su amigo Matt Damon había estado al pendiente de él todo el tiempo. Ben, en sus días más oscuros, dejó de bañarse y los paparazzi lo captaban en la entrada de su casa recibiendo pedidos de botellas de cerveza y whisky. Su aspecto era de un hombre que pedía ayuda a gritos.
Fue hace un par de días cuando aparecieron fotos en internet de Ben, notablemente con mejor estado físico y un semblante diferente. Y es ahora, a través de Instagram que demuestra por qué es más poderoso que Batman.
En un comunicado a sus seguidores, Ben declara:
“Esta semana he completado un periodo de 40 días de rehabilitación en una clínica para tratar mi adicción al alcohol y sigo en cuidados fuera del lugar.
El apoyo que he recibido por parte de mi familia, colegas y fanáticos representa más de lo que puedo decir. Me ha dado la fuerza y valor para hablar sobre mi enfermedad con otras personas.
Luchar contra una adicción toma una vida de dificultades y problemas. Debido a eso, en realidad nunca estás dado de alta en un tratamiento. Es un compromiso de tiempo completo. Estoy luchando por mí y mi familia. Muchas personas me han buscado en redes sociales y contado sus experiencias con las adicciones. A esas personas, quiera decirles gracias. Su fuerza es inspiradora y me ha apoyado de formas que no pensé que fueran posibles. Ayuda saber que no estoy solo. Y tengo que recordarme a mí mismo, que, si se tiene un problema, pedir ayuda es una señal de coraje, no de debilidad o fracaso.
Con aceptación y humildad, continúo validándome con la ayuda de muchas personas y estoy agradecido con todos aquellos que están ahí por mí. Espero que, con esto, pueda servir de ejemplo para otras personas que pasan por lo mismo”.
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Tal vez Bruce Wayne siga luchando contra sus demonios, pero Ben parece, por lo menos en esta ocasión, haber vencido a los propios.
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