A la una de la tarde el sol está que arde sobre las calles de Milán esta época del año. Sin embargo, el desfile de Prada Primavera Verano 2024 logra que salgamos de nuestras guaridas —en muchos casos, repensando nuestros outfits con este calor que hoy está azotando al mundo entero— y, como buena legión de aficionados a la moda, nada nos detenga en nuestro cometido de ver cuanto más podamos en una fashion week. Las agendas son apretadas, a veces no hay ni tiempo para comer —si es que tienes pensado ir a todos los shows—, puede que a medio camino entre venue y venue mucha gente sienta que ya no puede más, que un minuto más bajo los rayos solares puede ser el fin de todo… pero a un show de Prada no se falta. Y todos nos encaminamos hacia la Fondazione.
Habiendo tomado algo para refrescarnos antes de entrar, el set nos recibe con un pulcro y casi minimalista look de acero. Tanto los espacios para el desfile como para que los asistentes andemos y tomemos asiento son una especie de rejilla industrial. Un aspecto aspero, quizá, pero que a todos encanta justamente por su rudeza y personalidad brusca.
Comienza el show. Sale el primer look y detrás de él siguen apenas un par cuando la música cambia a un sonido de música industrial —conocidísimo para quienes vivimos en los años 90—. Se trata de Closer de Nine Inch Nails. Con este track de fondo empiezan a escurrir entonces cortinas de slime verdoso al costado de los modelos, en puntos estratégicos para no cortar la visión, pero sobre todo marcando un aquí y un allá entre el show y los asistentes. Para este momento, ¡vaya que los jadeos y sonidos de exaltación se dejaron oír!
La connotación sexual de todo esto es evidente. Una canción cuya letra nos repite constantemente «I wanna feel you from the inside», una sustancia que baja de los techos como si se tratara de precum o lubricación, el contraste entre la gentileza de este líquido con la inmaleabilidad del metal. Una decisión fuerte, pero muy efectiva para Prada.
Y sobre los diseños, he aquí nuestro veredicto.
1. Liberación
La colección de Prada Primavera Verano 2024 de Miuccia Prada y Raf Simons propone una libertad absoluta del cuerpo, expresada a través de los cimientos de las prendas que lo visten. La camisa, para empezar, es un punto de partida; su estructura y sus detalles se toman prestados como base para transformar una para transformar toda una gama de prendas masculinas: trajes, gabardinas, ropa deportiva y chaquetas de reportero. Partiendo de la simplicidad, la colección propone una noción de expansión, amplificación de una idea: una paradoja entre silueta y materialidad. El objetivo final es una conciencia constante del cuerpo interior y su desencadenamiento.
Mira las formas de cada prenda y cómo es que parecen querer siempre “un poco más allá”.
2. Adiós a la sastrería tradicional
En esta colección vemos una fluidez que cuestiona el lenguaje convencional del hacer sartorial. En el centro, las cualidades de ligereza y suavidad, creando una relación fluctuante entre el cuerpo y la ropa. Ni hablar de los géneros. Estas ideas se infiltran en todos los aspectos del vestido: diademas y diademas con gafas son accesorios que dejan muy en claro el sentido genderless que hoy tiene el diseño.
Por cierto, volviendo sobre estos accesorios de Prada, debemos hacer hincapié que son objetos formados por piezas únicas que parecen fragmentos capturados en movimiento —como si algo o alguien les hubiera solidificado de manera inesperada— y son inesperadamente suaves al tacto.
3. Estampados ultrasensoriales
La tactilidad de esta colección es apabullante. Prada ha logrado que deseemos tocar y sentir estos diseños en todo momento. La decoración en estas prendas es tridimensional, reinventando la idea de estampado floral mediante aplicaciones de ramilletes y flecos, animando lo estático y dando un dynamis diferente a nuestras prendas. Ampliando esta idea, fíjate también cómo los bolsillos utilitarios se alejan de su función para actuar más bien como dispositivos decorativos adicionales.
4. Es época de cambiar
Po último, una invitación. Seria y contundente. Las creaciones de Miuccia y Raf reflejan hoy nuestro estado natural, el movimiento dinámico y la transformación constante, inherentes a la humanidad, y nos terminan exhortando a seguir haciéndolo. Tan permeables y sensitivos como el slime de su show.
