
La colección Hermès FW 21 explora el vestir del hombre contemporáneo
La nueva colección de la maison francesa busca establecer puentes y un diálogo sobre dos mundos: el interior y el exterior.
Hermès FW21 explora la relación del exterior con el interior y cómo estos dos mundos colisionan en el vestir del hombre contemporáneo. La propuesta de Véronique Nichanian, directora artística, es renovación, es salir de la caja, es ofrecer una fuente de energía con la paleta de colores y serie de líneas modernas. Los detalles son fundamentales al conectar ambos mundos, son el puente entre el interior y el exterior que redondean este diálogo.
Las creaciones son híbridas y prácticas, las prendas son casuales pero esto no les resta nada de elegancia pues los materiales y el savoir-faire de la maison son inmaculados. La colección busca borrar límites y establecer conexiones, es el mismo caso con la línea entre vestimenta formal e informal. Los materiales son voluptuosos o compactos y se comunican en asociaciones audaces.
Entre ellos, encontramos diferentes tipos de piel, tejidos, lanas, algodones y gabardinas que a detalle muestran uno de los sellos de diseño de Véronique, la combinación de materiales tradicionales con tecnológicos. El mejor ejemplo son las piezas de lana, cashmere y algodón cuya naturaleza es absorbente, pero se vuelven repelentes al agua gracias al uso de acabados innovadores. El discurso entre la función interior de la prenda con su uso exterior se amplía aún más con esta propuesta de suavidad al ponerse y combate al interactuar con el ambiente.
Sin embargo, la diversidad de materiales no acaba aquí, el estampado ‘Drive me crazy’ se encuentra en algodones y sedas, una versión de uno de los prints invernales imprescindible pues los cuadros escoceses siempre serán un must de la temporada. En la colección los encontramos en dos paletas tonales distintas: una de vibrantes colores y otra neutra.
En el filme creado en colaboración con Cyril Teste, se muestra perfectamente cómo la colección cobra vida, el hombre Hermès vive la ropa y hace la transición entre interior y exterior sin esfuerzo. El escenario elegido es perfecto para plantear visualmente la inspiración y la conversación entre mundos. “Veo la arquitectura minimalista de Auguste Perret como una expresión de masculinidad. Es el espacio perfecto para evocar una cierta idea de nuestro tiempo y la fluidez recién descubierta gracias a la cual se puede ahora unir fácilmente mundos y comportamientos que tendían antes ahora para ser mutuamente excluyentes.” comenta Véronique.
Presentación Hermès FW 2021
Las siluetas propuestas se expresan en prendas de outerwear como parkas con cuellos altos, gabardinas, chamarras y un sinfín de tejidos de punto (el cual puede usarse todo el año): en cuello polo, redondo, alto y de tortuga. Al ser la pieza estrella de la temporada, la variedad de tejidos en textura visual y material son geniales. Además, el juego de capas se ve intensificado por blusones con zippers sobre playeras, sudaderas, camisetas y sacos que juegan con las dimensiones que la colección puede crear. La paleta de colores va de acuerdo a la temporada invernal con tonos como el rojo insignia de la marca, comino y azul frío se balancean y mezclan con tonos de regaliz, pimienta y azul petróleo.
Los accesorios es otro elemento que no puedes perder de vista, la joyería en plata hecha de palladium logra el toque perfecto de modernidad en cada look. Los maletines y el calzado son detalles que inmediatamente evocan la idea de un movimiento suave y elegante por su composición en materiales como piel, canvas y tejido.
La colección se distingue por sus sellos gráficos, bolsas colocadas para hacer un statement y una asimetría divertida; elementos que dan la ilusión optimista de movimiento. Es una invitación a pasear a buscar la energía del viaje, un sentimiento que hemos dejado de lado últimamente. Lo que se conserva es la búsqueda del confort, de la relajación y de otras dimensiones.