Hubo una época en la que el reloj dorado era el rey indiscutible de la muñeca de los hombres. Luego llegó la era de los smartwatches, las correas de silicona y las esferas discretas, casi invisibles. Pero, ¿qué dicen? La moda es cíclica, y actualmente los relojes dorados están volviendo a lo grande.
¿A quién tenemos que dar las gracias? A una mezcla explosiva de tendencia, nostalgia y, por supuesto, a las habituales celebridades que los paparazzi fotografían con modelos que parecen gritar: “Estoy aquí para hacerme notar, y lo hago muy bien”.
De Adam Brody a Jacob Elordi: el reloj dorado está de moda
Empecemos por Jacob Elordi, convertido ahora en un símbolo de elegancia informal con su Rolex Day-Date de oro amarillo asomando por el puño. ¿Quién iba a pensar que el chico de Euphoria recuperaría el encanto retro del reloj dorado?
Pero no es el único: Adam Brody, con un Langel vintage, parece sacado directamente del catálogo de estilo de los años ochenta, recordándonos que los relojes de oro no tienen por qué ser recientes para ser increíblemente cool.
Y si pensabas que el oro era solo para los amantes de la opulencia, Marcus Thuram demuestra lo contrario: Cartier de oro sí, pero combinado con un look deportivo que grita “sofisticado, pero asequible”. Una idea que también da en el clavo gracias a gente como A$AP Rocky, un maestro en el arte de mezclar alta costura y streetwear, a menudo con detalles dorados que iluminan hasta el más sencillo de los outfits.
¿Por qué vuelven los relojes dorados?
La respuesta es sencilla: porque funcionan. Un reloj dorado comunica éxito, confianza y, admitámoslo, una buena dosis de seguridad en uno mismo. Es el accesorio que te hace parecer un CEO aunque solo vayas a tomar un café. Hoy, sin embargo, el concepto ha evolucionado. Ya no necesitas un traje de raya diplomática para lucirlo; el estilo contemporáneo lo combina con jerseys oversize, jeans holgados y sneakers minimalistas. En resumen, el reloj dorado nunca ha sido tan democrático.
Hablando de iconos, ¿hay algo que represente mejor el estilo opulento y relajado de los años ochenta que el Classic Fusion de Hublot? La pregunta es retórica y la respuesta es “no”. Así que aquí lo tienes, en la última versión que rinde homenaje al mismo modelo que despertó la pasión por esta maison. Aquí en la versión de 42 mm, pero también disponible en un tamaño de 38 mm, para aquellos que quieran abrazar plenamente el espíritu vintage, incluidas las cajas más pequeñas.
Precio aproximado: 26,200 euros (unos $557,000 pesos mexicanos).
Entre los mejores relojes Cartier para hombre de la actualidad, este modelo es un esencial en cualquier colección. Aquí vemos un look imprescindible para el Tank Louis Cartier con su caja de oro amarillo y su movimiento mecánico de cuerda manual. La caja de 33.7 mm x 25.5 mm y 6.6 mm de grosor se combina con una correa de piel de caimán negra semimate.
Precio aproximado: 14,300 euros (unos $304,400 pesos mexicanos).
Fiel reproducción del legendario Vacheron Constantin de los años setenta, el Jumbo 222 tiene una caja monobloque en forma de tonel de 37 mm, completada por un bisel acanalado, y una cruz de Malta en la esfera, a las 5. A través del fondo de cristal de zafiro, es posible admirar el movimiento, equipado con una masa oscilante rediseñada especialmente.
Precio aproximado: 82,000 euros ($1,745,000 pesos mexicanos).
La silueta aerodinámica del Gucci 25H se inspira en las elegantes formas de la arquitectura contemporánea. Este reloj está diseñado con una caja delgada de 38 mm de diámetro y una correa de piel azul. La esfera de latón dorado tiene un motivo de Cruz GG.
Precio aproximado: 1,750 euros (unos $37,200 pesos mexicanos).
El Casio Vintage A100 rinde homenaje al primer reloj de la marca fabricado con caja de resina. Se mantiene la icónica disposición con cuatro botones frontales, pero con nuevos componentes metálicos. De estilo retro pero con una funcionalidad moderna, estos relojes disponen de cronómetro, calendario y luz LED para facilitar la lectura con cualquier iluminación. El práctico broche es deslizante.
Precio aproximado: 56 euros (unos $1,200 pesos mexicanos).
Esfera negra mate, detalles en acero que llaman la atención: básico, elegante, decidido. Con solo 6 milímetros de grosor, el nuevo Ultra Thin 40 mm es la esencia del diseño minimalista. Cada línea está pensada para eliminar lo superfluo, dejando espacio para el equilibrio perfecto entre forma y función.
Precio aproximado: 375 euros (unos, $7,900 pesos mexicanos).
Elegancia atemporal en un diseño compacto: el Philip Watch Museum se distingue por su caja de acero pulido de color dorado –24.70 x 34.10 mm, y grosor de 7.50 mm– y su correa delgada a juego con hebilla de mariposa. La protección está garantizada por el cristal de zafiro antirreflejos, mientras que el movimiento de fabricación suiza asegura precisión y fiabilidad. Perfecto para quienes aprecian un estilo clásico enriquecido con detalles que no pasan desapercibidos.
Precio aproximado: 490 euros (unos $10,400 pesos mexicanos).
El Tissot Ballade combina tradición y versatilidad en un reloj diseñado para los momentos más significativos. La caja de acero 316L con tratamiento PVD dorado (40 mm x 8.25 mm) está adornada con un bisel acanalado, emblema de la artesanía clásica. La esfera guilloché de rayos de sol captura la luz de forma única, mientras que la pulsera intercambiable de liberación rápida garantiza un cambio inmediato de estilo. Con cristal de zafiro resistente a los arañazos y resistencia al agua hasta 100 metros, es la elegancia que resiste el paso del tiempo.
Precio aproximado: 445 euros (unos $9,500 pesos mexicanos).
Artículo publicado originalmente en GQ Italia.