Mantener una amistad a distancia no es sencillo, porque no pueden ponerse al corriente un día cualquiera en una cena o invitarse a casa el domingo. Hay una tendencia a depender de Zooms programados y mensajes de “pienso en ti” que pueden parecer más forzados que divertidos.
La buena noticia es que la distancia no tiene por qué significar el fin de su vínculo, basta con pensar en cuántas personas se mudan durante los años universitarios o antes de formar una familia. Por no hablar de cómo una pandemia mundial convirtió las interacciones a distancia en algo más normal. “La cercanía física no es una medida de la cercanía emocional”, dice Jerilyn Adams, LPC, terapeuta de Milwaukee. De hecho, “las relaciones más fuertes se dan entre personas que están dispuestas a esforzarse a pesar de la distancia”.
Solo unos pocos hábitos pequeños e intencionales harán un mundo de diferencia en mantenerse conectados y construir una buena amistad incluso cuando estás a kilómetros de distancia. A continuación, reunimos los mejores consejos de expertos para mantener una amistad a distancia.
1. Hábitos de comunicación
No hay reglas infalibles, todo depende de cada amistad. Algunas personas pueden pasar semanas en silencio y retomar la conversación donde la dejaron con una llamada de FaceTime. A otros se les facilita recibir actualizaciones periódicas para sentirse valorados.
“Sea cual sea el caso, tú y tu amigo deberían acordar algún tipo de ritmo”, dice Miriam Kirmayer, , psicóloga e investigadora de la amistad con sede en Montreal. “No tiene por qué ser cada día o cada semana, pero es importante averiguar qué es factible, realista y solidario”. Ya sea que preguntes “¿Está bien si nos hablamos todas las semanas?” o acuerdes establecer un marcador mensual recurrente en tu calendario, establecer esas expectativas te ayudará a evitar malentendidos y que tu amistad se pierda con el tiempo.
2. Creatividad para mantener el contacto
Los mensajes de texto, las llamadas y los correos electrónicos no son las únicas formas de conectar. Enviar memes de Instagram o artículos sobre el chisme de tu famoso favorito, por ejemplo, podría ser más auténtico para su relación que un simple mensaje de “¿Qué hay de nuevo?” O si quieres un punto de contacto regular, pero odias la idea de las videollamadas programadas de una hora, ¿por qué no pruebas hacer tareas juntos por teléfono o hablar casualmente mientras hacen algo como cocinar? es una forma más relajada de mantenerse en contacto sin la incomodidad de mirar fijamente la cámara durante una “reunión” virtual.
3. Sé específico en tus “check-ins”
“Hola, ¿cómo va la vida?” es una forma bastante genérica e impersonal de iniciar una conversación a la que es difícil responder. Mejor háblale de algo concreto. ¿Han conseguido recientemente el trabajo de sus sueños? Pregúntale cómo le ha ido. Quizás acaba de regresar de un viaje, pregúntale si el destino era todo lo que esperaba.
“Esta intencionalidad le demuestra a tu amigo que lo que es importante para él también lo es para ti y que no te has olvidado de él aunque estés ocupado con tu propia vida”, explica Adams. Además, puede desencadenar ese “¡Ah, se acordó!” que hace que tu amigo se sienta valorado de un modo que un simple “¿Cómo has estado?” no consigue.
4. Adapta tus rutinas a la nueva distancia
Cuando están cerca los rituales familiares pueden hacer que su amistad se sienta naturalmente segura, tanto si se divertían los sábados por la noche como si tenían el hábito semanal de ir a comprar comida rápida y dar una vuelta. Perder esos momentos seguramente hacen que sientas que te falta algo; sin embargo, con un poco de creatividad, aún puedes tener esas experiencias compartidas desde la distancia.
Si, por ejemplo, su vínculo estaba arraigado en las sesiones mensuales del club de lectura, pónganse de acuerdo para empezar juntos esa novela de terror. Después de algunos capítulos, llámense para intercambiar opiniones, reseñas y spoilers. O si platicaban cuando eran roomies, hagan FaceTime mientras están en la lavandería o doblando la ropa limpia. Estos pequeños contactos harán que su amistad no termine.
5. Inventen nuevas formas de mantener su relación emocionante
Tan importante como revivir rutinas es introducir también alguna novedad. “Si encuentran nuevas formas de crecer juntos, su amistad seguirá prosperando y se sentirá menos como una versión rara y anticuada de algo que ya tenían en el asado”, dice la doctora Kirmayer.
Piensa en las experiencias o aficiones que más les gustan, pueden hacer un tablero compartido en Pinterest o aprendan un nuevo idioma en Duolingo. Recurran a juegos en línea para animar las cosas y de este modo, no se aferren al pasado y su conexión crecerá activamente con nuevas experiencias.
6. No dejes que se olviden de lo mucho que significan para ti
Es fácil dar por sentado que tu mejor amigo sabe que lo valoras pero dedicar tiempo a expresar explícitamente tu aprecio, aunque sea de forma sutil, le reafirmará lo fuerte que es su conexión.
“Existe la creencia generalizada de que es incómodo compartir lo mucho que nos importan nuestros amigos”, afirma la doctora Kirmayer. “Defendemos la importancia de decirle a nuestras parejas románticas que las queremos, y nuestras amistades también pueden beneficiarse de ese mismo tipo de reconocimiento abierto”.
Esto no significa que tengas que escribir cartas de amor. Los pequeños gestos como decirle que que los extrañas después de escuchar una canción que te recuerda a ellos, es un recordatorio muy necesario de que no son sólo una ocurrencia tardía, sino una verdadera prioridad.
“Hay un poder real en una amistad que ha superado la distancia física y ha salido fortalecida del otro lado”, señala la doctora Kirmayer, y es algo que vale la pena celebrar. A pesar de lo tedioso que puede resultar mantenerse en sintonía a través de diferentes códigos postales o zonas horarias, ese mismo compromiso es lo que hace que estas relaciones sean de las más sólidas. Ambos eligen mantener viva la conexión, incluso cuando sería más fácil dejar que se desvanezca.
Artículo originalmente publicado por SELF.