Era inevitable que algún día Daniel Craig —un ávido usuario exclusivo de relojes Omega desde que se convirtió en James Bond— luciera su propio MoonSwatch, el reloj que lleva más de un año causando furor y creando un amplio club de fans que desean con pasión tener la oportunidad de adquirir un de los 11 relojes inspirados en el Sistema Solar. Al igual que ellos, Craig tendría que esperar a que llegara su momento, pero cuando se presentara la oferta, pagaría 275 dólares por el privilegio.
El 007 da el voto de confianza al MoonSwatch
Si alguna vez ha existido un modelo de masculinidad en la era moderna, es difícil encontrar a alguien mejor que el siempre bien vestido Daniel Craig. Convirtió a James Bond en un hombre honesto y luego (alerta de spoiler) lo hicieron saltar por los aires para que pudiera centrarse en pasatiempos más favorables como bailar con un chaleco blanco, mostrar al mundo cómo llevar un pañuelo en el cuello y, más recientemente, presentar un premio en la gala de los National Board of Review Awards a su compañera de reparto en Glass Onion, Janelle Monáe.
Fue en esa aparición cuando vimos la inconfundible caja biocerámica de un MoonSwatch. A diferencia de Ed Sheeran (su Misión a la Luna es la más clásica) y Zlatan Ibrahimović (su Misión a Marte es la más llamativa), la elección de Daniel Craig es menos inevitable de lo que podríamos haber predicho.
Lean lo que quieran sobre el hecho de que Daniel Craig eligiera Neptuno (el octavo planeta desde el sol) en lugar de Urano, que es el séptimo más lejano —como un emotivo guiño a su papel como el 007—. Quizá no le gustó el juego de palabras de “Misión a Urano”, tal vez esté reafirmando que está encantado de dejar de ser Bond, o simplemente quizá Neptuno era el único que estaba disponible, dada la alta demanda de la mítica colaboración entre Omega y Swatch.
El Misión a Neptuno de Omega y Swatch es azul claro con esfera y bisel azul oscuro, mientras que sus agujas e índices blancos se supone que nos hacen temblar del frío que parece hacer en el octavo planeta del Sistema Solar. Su órbita alrededor del Sol dura 165 años, y aunque no es la elección más obvia, nada se le escapa a Daniel Craig, ya que el Neptuno sigue siendo, con diferencia, el MoonSwatch más demandado, y los locos antes mencionados siguen dispuestos a pagar ocho veces su precio de venta al público.
Independientemente de cómo lo haya conseguido y de por qué lo haya elegido, ¿podemos confirmar oficialmente que no es necesario combinar un reloj de vestir con un traje? Daniel Craig siempre es la viva imagen del estilo y lucir un MoonSwatch con un look de alfombra roja es la prueba de que este reloj ha trascendido todas las esferas —incluso las del MI6—
Artículo publicado originalmente en GQ Reino Unido.
